Columna basada en el libro “El Valle de la Muerte”, escrito por Roberto Musso, emprendedor y Presidente Ejecutivo de DigEvo Group, 2014

Con frecuencia se dice que las crisis pueden dar origen a interesantes oportunidades de negocios y hasta gestar un baile de oportunidades. Pero, lo cierto es que las crisis no son la única fuente de oportunidades. Estas pueden llegar inesperadamente a nuestra vida, podemos ir tras ellas y “cazarlas”, y por supuesto, también podemos crearlas.

En 1999 el guatemalteco Matías de Tezanos se preguntaba por qué la mayoría de las grandes empresas americanas que visitaba a través de Internet tenían sitios webs tan pobres, cuando firmas menos importantes contaban con portales mucho más atractivos. Justo días antes, Matías había estado con un amigo diseñador a quien le había mostrado sus diseños para homepages. Eran mucho mejores que los de cualquier compañía americana. Matías decidió que había una oportunidad. Llamó a su amigo diseñador, le pidió algunas maquetas y se las envió a diez grandes empresas ofreciéndoles rehacer sus sitios web. Dos aceptaron. En ese momento Matías decidió abandonar su carrera de odontología y dedicarse a emprender.

Una vez que entendemos cabalmente los cambios y sucesos que con fuerza gobiernan a los mercados y los hábitos del consumidor, podemos vislumbrar necesidades que están esperando a ser satisfechas por emprendedores visionarios como tú y yo.

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